Elsa Sosa, de 62 años, fue hallada muerta en su casa. Tenía un golpe en la cabeza y un cable enrollado en su cuello. Era testigo y querellante de un juicio de crímenes de lesa humanidad que tiene varios procesados y víctimas, entre ellos su pareja, Aldo, desaparecido en Mendoza en 1975.
Elsa Marta Sosa de Fagetti, testigo y querellante en el juicio por crímenes de lesa humanidad de San Rafael, Mendoza, fue asesinada ayer en su casa de Córdoba, donde vivía.
Tanto la Policía Federal como la de la provincia de Córdoba, habrían caratulado el hecho como homicido ocurrido en ocasión de robo. Aunque aseguran que en el domicilio de Sosa, ubicado en la capital cordobesa, no faltaba nada.y además habrían solicitado desvincularlo de cualquier relación con la calidad de testigo-querellante de Sosa de Fagetti,
El caso que investiga la desaparición de Fagetti y otra decena de personas está en el marco de los juicios por lesa humanidad, en donde hay 27 procesados que están acusados por delitos contra 72 víctimas. Entre ellos la ex presidenta María Estela Martínez de Perón, por tratarse de hechos que ocurrieron antes del golpe militar de 1976, pero en donde el terrorismo de Estado ya se había instalado desde las fuerzas parapoliciales.
Elsa era pareja de Aldo Fagetti, un militante de la Juventud Peronista y Montoneros que fue secuestrado y desaparecido el 25 de febrero de 1975 en Mendoza. Fue el primer desaparecido en dicha provincia antes de que se instaurara la dictadura cívico-militar.
En 2007, Elsa Sosa había logrado que la justicia pidiera la extradición de la ex mandataria que gobernó posterior a la muerte de Perón, así como también quedaron acusados los ex ministros Antonio Cafiero y Carlos Ruckauf.
El debate judicial comenzó en 2015 y hace un mes entró en instancia de alegatos.
De comprobarse el homicidio agravaría potencialmente la situación de los Derechos Humanos en el país, hecho que podría compararse con el asesinato de Silvia Suppo en Santa Fé, quien había declarado en contra de un juez que operó en la dictadura, o con la desaparición de Julio López en 2006, luego de que su testimonio condene al represor Etchecolatz.
Fuentes: Infocielo, la retaguardia