Es el 4to fallo para casos de violencia de género como delito autónomo de lesa humanidad
El juicio que se llevó adelante en el Tribunal Oral Federal de Santa Fe, a siete imputados por delitos de violación a los derechos humanos durante la última dictadura militar, tuvo su resolución en la mañana de ayer 24 de mayo.
Se trataba de una patota que secuestraba, torturaba y violaba a militantes políticos en nuestra ciudad. Si bien muchos de ellos ya son conocidos delincuentes con frondosos prontuarios y condenas por sus acciones durante la dictadura, esta vez llegaban al banquillo de los acusados represores que venían zafando de la justicia, como es el caso de Víctor Hugo Cabrera, Héctor Melitón Martínez y Eduardo José Córdoba, quienes participaban junto Eduardo Ramos, Juan Calixto Perizzotti, Ricardo Silvio Ramón Ferreyra y María Eva Aebi de las siniestras patotas represivas que asolaban nuestras calles.
Delitos cometidos por seis integrantes de la Policía y un militar, jefe de operaciones del área 212, durante la dictadura.
El Tribunal Oral de Santa Fe dictó su cuarta sentencia desde que es el primero en el país, en 2010, que juzga la violencia de género como delito autónomo de lesa humanidad.
Las agresiones sexuales cometidas en centros clandestinos consistieron en violaciones, abusos, abortos forzados, desnudez, tocamiento. La Procuraduría señaló que a marzo de 2019, solamente el 12% de las sentencias incluye este tipo de delitos (26 de 219). Parte de las violencias contra las mujeres fueron los partos en cautiverio y el robo y apropiación de bebés.
Las condenas quedaron establecidas así: al PCI Eduardo “Curro” Ramos a 20 años de cárcel por la “violación” a una adolescente de 16 años y el “abuso deshonesto” de una niña de 14 que militaban en la UES en 1976 y al comisario Ricardo Ferreyra a 15 años de prisión por los mismos cargos como autor mediato. Los otros cinco condenados son: un coronel del Ejército que operaba en el Destacamento de Inteligencia 122, Héctor Melitón Martínez, a 12 años de prisión por secuestros y torturas en un centro clandestino en San José del Rincón; el ex coordinador del Área 212, Juan Calixto Perizzotti (10 años), su secretaria María Eva Aebi (7 años), su chofer, Eduardo Córdoba (4 años) y un cómplice de la patota de Ramos en el D-2, Víctor Hugo Cabrera (6 años).
El secretario nacional de la Liga Argentina por los Derechos Humanos José Schulman no ocultó su disgusto por la pena tan baja a Cabrera, a quien el Tribunal condenó a seis años de prisión (la mitad de lo que solicitó el fiscal Suárez Faisal) por la “privación ilegal de la libertad” de Schulman, su ex esposa Graciela Roselló y el compañero de ambos, Hernán Gurvich, pero lo “absolvió” por los “tormentos” a los tres. “Vamos a esperar los fundamentos. Absolver a Cabrera por las torturas es ofensivo. El monto de la pena es mínimo, seis años”.
En su discurso ante la nutrida concurrencia en las escalinatas del Tribunal Oral, Schulman destacó que “lo importante es que luego de tantos años, la verdad que dijimos el primer día se sostiene y hoy va a tener un reconocimiento judicial, y por tener un reconocimiento judicial será una verdad más fuerte en la sociedad que es lo que nosotros buscamos”
También se refirió a los presos políticos: “vamos a hacer un enorme acto público el 4 de julio en Ferro con todos los que quieran decir lo mismo, nosotros que el primer acto de gobierno de cualquier gobierno que reemplace al gobierno de Macri sea la libertad de los presos políticos porque sus causas son injustas, porque el Poder Judicial es corrupto, porque fueron sentenciados por el poder mediático antes de ser detenidos y porque ningún movimiento popular puede luchar por la democracia verdadera sino recupera a sus presos”.
Luego dijo Schulman: “Si el movimiento popular no entiende que la existencia de presos políticos es la señal más contundente de que no hay elecciones libres en Argentina, que no hay democracia en Argentina, que no va a haber alternativa política en Argentina, mientras haya presos políticos estamos en serios problemas porque los presos políticos condensan el programa de dominación, condensan el discurso de estigmatización, el lugar del poder judicial, el lugar de la cloaca, de las operaciones de inteligencia, y si no lo enfrentamos todo eso puede ser que se vaya Macri, pero muy difícil que se vaya el macrismo”.
En tanto la hija de Cabrera, Silvina, que estaba junto a su mamá, Susana, y su hermana menor, María, coincidió: “Lo condenaron, pero esperábamos más. Seis años de prisión (domiciliaria) no cubren 43 años de dolor. Habrá que esperar”
El fiscal había pedido 20 años de prisión para el coronel Martínez, uno de los jefes del Destacamento de Inteligencia 122. El Tribunal lo condenó a 12 años por secuestros y torturas a Daniel García, su esposa Alba Sánchez y Andrea Trincheri, en un centro clandestino al que llamaban “El Borgia”.
Fuentes: Pagina12rosario, Agenciapacourondo.
Agradecemos a Alejandro Cordoba por el vídeo de Schulman